FRANCISCO MORAZÁN, HONDURAS.
Las acciones para cumplir con la normativa de la Unión Europea (UE), contra la deforestación, clave para mantener el acceso a ese mercado, que absorbió el 54 por ciento de las exportaciones de café en 2024, intensifica Honduras, comunicó el presidente ejecutivo del Instituto Hondureño del Café (Ihcafe), Pedro Mendoza.
Indicó que, el trabajo se realiza en coordinación con oenegés nacionales e internacionales, exportadores e intermediarios, como herramientas una aplicación del Ihcafe, que atiende a más de 74 mil productores.
Destacó que, “estamos yendo al territorio para explicarles a los caficultores qué deben hacer y orientarlos para que contraten, sobre todo, a jóvenes, porque manejan bien el teléfono, requieren poca logística y pueden movilizarse como puntos de referencia”.
Señaló que, también está trabajado en la delimitación de polígonos productivos, diferenciando fincas de menos de cuatro hectáreas y fincas mayores, para facilitar la trazabilidad y la verificación de prácticas agrícolas.
Asimismo, explicó que, ya hay movimiento exportador y compromisos de los agentes comerciales.
Igualmente, dijo que, no existe certeza sobre una nueva prórroga por parte de la UE.
Refirió que, si bien existe la posibilidad de una nueva prórroga por parte de la Unión Europea, el sector no debe confiarse y continuará consolidando la información técnica necesaria, incluido un documento que acredite que las fincas están bajo sombra, para cumplir los requisitos del mercado comunitario.
Recalcó que, “nosotros trabajamos para que nuestras fincas estén bajo sombra, que cuidemos el bosque. Lo único que nos falta es un documento que nos refleje y nos diga que nuestras fincas están bajo sombra”.
Cabe recordar que, la Comisión Europea anunció el 23 de septiembre que buscará retrasar otro año la entrada en vigor de la nueva legislación comunitaria para frenar la deforestación importada, porque el Ejecutivo no ha logrado simplificar suficientemente la normativa.
El reglamento busca evitar que ciertas materias primas y productos derivados consumidos en la UE generen deforestación, pues entre 1990 y 2020 se destruyó globalmente una superficie de masa forestal mayor que la de la UE, y cerca de un 10 % es atribuible al consumo europeo.
Por lo cual, la normativa afecta al ganado, el cacao, el café, el aceite de palma, la soja, la madera y el caucho, incluidos derivados como cuero, chocolate o muebles y, originalmente, debería haber entrado en vigor el 30 de noviembre de 2024.
En tanto, especificó que, las compañías que importen en la UE esas materias primas deberán demostrar mediante un sistema de geolocalización que no han generado deforestación o degradación de masas forestales allí donde se han obtenido los recursos.