• A solo 10 días de terminar el año, la DNVT confirma 1,824 fallecidos; Francisco Morazán y Cortés concentran la mayor cantidad de incidentes.
TEGUCIGALPA, HONDURAS.
A diez días de concluir el 2025, Honduras enfrenta una de sus cifras más alarmantes en materia de seguridad vial. Las muertes por accidentes de tránsito ya superan las 1,800 víctimas en lo que va del año, de acuerdo con estadísticas oficiales de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT).
La portavoz de la institución, Ricci Montoya, detalló que del 1 de enero a la fecha se contabilizan 1,824 personas fallecidas a causa de percances viales en todo el territorio nacional, una cifra que mantiene en alerta a las autoridades de tránsito y a los cuerpos de socorro.
Fin de semana trágico
Solo durante el fin de semana reciente, la DNVT reportó más de 40 incidentes viales, con un saldo preliminar de cuatro personas fallecidas, reflejando que la siniestralidad en las carreteras se mantiene elevada en plena recta final del año.
Según Montoya, los departamentos de Francisco Morazán y Cortés encabezan las estadísticas como las zonas con mayor número de accidentes viales, debido al alto flujo vehicular, la concentración urbana y el incremento de desplazamientos durante la temporada festiva.
Segunda causa de muerte violenta
Las autoridades recordaron que los accidentes viales representan la segunda causa de muerte violenta en Honduras, únicamente superados por los homicidios, lo que evidencia la magnitud de una problemática que persiste año tras año.
Entre las principales causas identificadas por la DNVT figuran:
• Imprudencia del conductor, especialmente el exceso de velocidad.
• Conducción bajo los efectos del alcohol.
• Distracciones, como el uso del teléfono celular al volante.
• Desobediencia a las señales de tránsito.
• En casos de atropellos, imprudencia peatonal.
Llamado urgente
Ante este panorama, la DNVT reiteró su llamado a la población a conducir con responsabilidad, respetar las normas de tránsito y evitar conductas de riesgo, especialmente durante las celebraciones de fin de año, cuando el tráfico y el consumo de alcohol suelen incrementarse.
Las autoridades advirtieron que, de no modificarse los comportamientos al volante, las cifras podrían seguir aumentando antes de cerrar el 2025, profundizando una crisis vial que ya cobra miles de vidas en el país.








