• Abogado Kennett Madrid y politóloga Patricia Bourdeth coinciden en que el próximo Congreso debe impulsar cambios profundos y consensuados
TEGUCIGALPA, HONDURAS.
Ante los conflictos y fallas evidenciadas en el reciente proceso electoral, el abogado Kennett Madrid sostuvo que es urgente e impostergable impulsar reformas electorales profundas en Honduras, una responsabilidad que —según indicó— recaerá directamente en el próximo Congreso Nacional, con el objetivo de evitar que se repitan escenarios de tensión e incertidumbre como los vividos recientemente.
“Las reformas electorales es algo fundamental que debe suceder y no tiene que dársele mayor dilación porque el sistema no da para más”, advirtió el profesional del derecho, al tiempo que enfatizó que dichos cambios deben surgir de una concertación amplia, donde no solo participen los políticos, sino que también se escuche a la ciudadanía, principal afectada por la crisis de credibilidad del sistema electoral.
“Los políticos deben sacar las manos del CNE”
Madrid fue enfático al señalar que uno de los principales males del proceso electoral es la injerencia directa de los partidos políticos en el órgano electoral, situación que, a su criterio, ha debilitado la confianza ciudadana.
“El pueblo está pidiendo que los políticos saquen las manos del Consejo Nacional Electoral, porque quedó evidenciado que tres partidos metidos dentro de la institución solo generan desconfianza”, señaló, en referencia a los problemas suscitados también en torno al Sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), cuya tercerización —afirmó— fue consecuencia de la falta de confianza entre las propias fuerzas políticas.
En ese sentido, el abogado contrastó la realidad hondureña con la de países desarrollados, donde los organismos electorales cuentan con sistemas propios de transmisión, respaldados por tecnología de punta, lo que garantiza procesos más ágiles, confiables y transparentes. “A eso debemos aspirar como país”, remarcó.
Ciudadanización y cambios en el calendario electoral
Otro de los puntos clave planteados por Madrid es la ciudadanización de las Juntas Receptoras de Votos, proponiendo que sus integrantes sean seleccionados mediante sorteos aleatorios, reduciendo así la manipulación partidaria.
Asimismo, sugirió revisar la fecha de celebración de las elecciones, proponiendo que estas ya no se realicen el último domingo de noviembre, sino en septiembre, con el fin de contar con mayor margen para revisar inconsistencias, atender solicitudes de recuento y lograr una declaratoria definitiva a más tardar el 30 de noviembre.
“De esa forma, el nuevo gobierno tendría al menos dos meses para una transición pacífica y ordenada”, explicó.
Tecnología y modernización del sistema
Madrid planteó que las reformas deben aprobarse el próximo año para ser ratificadas con la entrada de la legislatura en 2027, lo que permitiría iniciar un proceso real de institucionalización del CNE, con nuevas autoridades, visión y una plataforma tecnológica robusta antes del siguiente ciclo electoral.
En cuanto a innovación, propuso abandonar gradualmente los sistemas biométricos basados únicamente en huellas dactilares y avanzar hacia el reconocimiento facial, con el fin de agilizar el proceso y hacerlo más confiable. “El CNE debe preparar su infraestructura tecnológica con la anticipación necesaria”, subrayó.
Bourdeth: en seis meses pueden lograrse reformas
Por su parte, la politóloga Patricia Bourdeth coincidió en la necesidad de reformas urgentes y aseguró que, si existe voluntad política y consenso entre el próximo Congreso Nacional y la sociedad civil, en seis meses podría aprobarse una nueva ley electoral o un paquete de reformas sustanciales, tomando como base normativas anteriores.
Advirtió que cualquier congresista que se niegue a reformar el sistema electoral “será calificado por el pueblo y la sociedad civil”, al considerar que la demanda de cambios es clara y generalizada.
Entre las reformas prioritarias, Bourdeth cuestionó que la ausencia de un consejero propietario o suplente pueda paralizar o retrasar procesos clave, calificando como “vergonzoso” que el actual proceso se haya visto afectado por estas prácticas, señalando directamente al Partido Libertad y Refundación (Libre) y al consejero Marlon Ochoa.
Licitaciones abiertas e independencia del CNE
La analista también subrayó que las licitaciones no deben retrasarse ni manejarse de forma opaca, sino abrirse de manera transparente a todos los hondureños, con observación directa desde el CNE y no bajo control de los partidos políticos.
Finalmente, planteó que si bien los partidos pueden tener una participación gradual en el proceso, esta debe ser operativa, mientras que la cúpula del Consejo Nacional Electoral debe ser totalmente independiente de la influencia política, como condición indispensable para recuperar la confianza ciudadana y garantizar elecciones creíbles.








