La guerrilla colombiana del Ejército de Liberación Nacional (ELN) anunció ayer lunes que dio por terminada la suspensión unilateral de los secuestros que ofreció en medio de la negociación de paz con el Gobierno, lo que supone el regreso de una de las prácticas más temidas en medio del conflicto armado.
El grupo rebelde, que mantiene un diálogo de paz con el Gobierno del presidente Gustavo Petro, justificó su decisión en la demora para poner en funcionamiento un Fondo Multidonante destinado a financiar las actividades de paz con las que se busca sacar al ELN de un conflicto interno de seis décadas que ha dejado más de 450 mil muertos.
“A la fecha, el fondo aún no está constituido, el Gobierno muestra poca voluntad para avanzar en este campo”, dijo el grupo guerrillero en un comunicado.
“Dado lo anterior, el ELN da por terminado su oferta de suspensión unilateral de retenciones económicas”, aseguró el grupo rebelde conformado por más de 5 mil 800 personas, incluidos más de 3 mil combatientes.
El secuestro es una de las principales fuentes de financiación del grupo rebelde con la extorsión, el narcotráfico y la extracción ilícita de oro, de acuerdo con fuentes de seguridad que acusan a esa guerrilla del secuestro de miles de personas a lo largo del conflicto.
Aunque han transcurrido seis ciclos desde que Petro restableció las conversaciones con el ELN a finales del 2022, el proceso enfrenta una crisis por la decisión del Gobierno de avanzar en un diálogo con un frente de guerra de ese grupo por fuera de la mesa de negociación con el propósito de que entregue las armas y se reincorpore a la sociedad.
La delegación del Gobierno en la mesa de diálogos con el ELN dijo que el acuerdo para la creación del Fondo Multidonante contempló la financiación de las actividades de paz contenidas en la agenda, pero de ninguna manera una contraprestación a la suspensión del secuestro o la interrupción de otra acción específica incluida en el cese al fuego.
“El comercio con seres humanos no tiene ninguna clase de justificación y su eliminación no es objeto de ninguna transacción por parte del Estado colombiano”, aseguró la delegación gubernamental en un comunicado.
“Esperamos que el ELN mantenga el compromiso adquirido ante la sociedad colombiana y la comunidad internacional y ponga fin a cualquier forma de secuestro”, agregó.
Las negociaciones de anteriores gobiernos con el ELN, considerado como una organización terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea, no avanzaron por sus posiciones radicales, una cadena de mando difusa y disensos en sus filas.
Con información de Reuters
