Una joven hondureña de 18 años de edad, originaria de Iriona, Colón fingió su propio secuestro para recibir dinero de su madre radicada en los Estados Unidos, y fue descubierta por la Unidad Nacional Antisecuestro (UNAS).
De acuerdo a la información brindada por las autoridades, la joven que es ama de casa, salió de la vivienda en San Pedro Sula y no regresó, posteriormente se contactó con su madre a través de redes sociales haciéndose pasar por el captor para pedirle el rescate.
Le exigía una suma de 750 dólares, equivalentes a 18, 500 lempiras, y de no entregarlos la amenazaba con que «no volvería a ver a su hija».
La hondureña pretendía saldar sus deudas con el pago del secuestro que fingió, sin embargo, su plan se vino abajo gracias a la tarea de la Unidad Antisecuestro.
En tal sentido, es sospechosa del delito de simulación de infracción inexistente, y de acuerdo al Código Penal de Honduras, podría enfrentar una pena de seis meses a dos años en prisión.