• Gustavo Boquín confirma la pérdida de 80 mil empleos, 18 mil viviendas que no se construyeron y empresas a punto de quebrar por la falta de pagos del Gobierno.
TEGUCIGALPA, HONDURAS.
La industria de la construcción atraviesa una de sus peores crisis en décadas, según confirmó el presidente de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (CHICO), Gustavo Boquín, quien responsabilizó directamente al Gobierno por el incumplimiento de pagos que mantiene al sector paralizado, con miles de empleos perdidos y empresas al borde del cierre.
Boquín aseguró que la deuda acumulada del Gobierno con la construcción supera los 4,000 millones de lempiras, de los cuales 2,000 millones ya están disponibles en Tesorería para ser cancelados, pero el Estado no los ha desembolsado.
“Necesitamos que el Gobierno se ponga la mano en la conciencia y haga frente a sus obligaciones. Que pague, por lo menos, lo que ya está en Tesorería”, reclamó.
Más de 80 mil empleos ya se perdieron y 18 mil viviendas quedaron sin construirse
A diferencia de estimaciones o proyecciones, Boquín fue categórico: las pérdidas ya ocurrieron.
• Más de 80,000 empleos se han perdido en todo el país.
• En 2025 se dejaron de construir más de 18,000 viviendas.
• La actividad del sector se ha desplomado frente a la falta de inversión pública.
“Ha sido un año triste para la industria de la construcción”, lamentó.
Empresas ya están en quiebra técnica y comenzarán despidos
Boquín afirmó que varias empresas se encuentran al borde de declararse en quiebra, producto de la prolongada falta de pagos del Gobierno.
“Hay empresas que están por declararse en quiebra y empezarán a despedir personal”, aseguró.
Esto significa que el impacto social continuará profundizándose, afectando directamente a miles de familias que dependen de la construcción.
El Gobierno, señalado por incumplimiento y mala gestión
La crítica del sector construcción se suma a las denuncias de otros rubros productivos que señalan al Gobierno por:
• No ejecutar correctamente el presupuesto de infraestructura.
• Atrasar pagos a contratistas durante meses.
• Paralizar proyectos de inversión pública.
• Generar un clima de incertidumbre que frena la inversión privada.
Este efecto dominó ha golpeado directamente a la construcción, históricamente uno de los motores económicos del país.
Impacto económico nacional: un sector clave detenido
La parálisis del sector construcción implica:
• Menor actividad económica.
• Caída en la venta de materiales e insumos.
• Reducción de empleo formal.
• Disminución en la inversión privada y pública.
• Menos acceso a vivienda para miles de familias.
CHICO insiste en que el Gobierno debe pagar inmediatamente lo adeudado para evitar el cierre de más empresas y la pérdida de aún más empleos.
Un llamado urgente y directo al Gobierno
Boquín dejó claro que el tiempo se agotó: el sector ya está en crisis, no a punto de entrar en una. Y responsabilizó al Gobierno por no cumplir con su palabra ni con sus obligaciones financieras.
Mientras el país enfrenta desaceleración económica y crecientes demandas sociales, la industria de la construcción exige una respuesta inmediata para evitar un colapso mayor.










