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martes, mayo 7, 2024
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Luis Redondo se está exponiendo a un juicio político al jugar con la voluntad de los diputados del CN, advierte Carlos Umaña

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TEGUCIGALPA, HONDURAS.

El presidente del Congreso Nacional Luis Redondo, con sus actuaciones “está coqueteando” con que se le pueda hacer un juicio político, advirtió este viernes el diputado del Partido Salvador de Honduras (PSH), Carlos Umaña.

El parlamentario acusó al presidente del Legislativo de cometer un abuso de autoridad al no someter a votación de los 128 diputados la renuncia del ingeniero Salvador Nasralla, asegurando contar con el respaldo del 90% de las firmas necesarias.

Umaña afirma que Redondo se autodenomina intérprete de la Constitución y ha suplantado funciones del Consejo Nacional Electoral (CNE), al inhabilitar al ingeniero Salvador Nasralla, una tarea que corresponde al Consejo Electoral. Además, señala la posibilidad de recurrir al tribunal de justicia partidaria.

Umaña advierte que el presidente del Congreso “está jugando peligrosamente” con la voluntad de los diputados, incluso mencionando la posibilidad de iniciar un juicio político.

De acuerdo con el también galeno, varios diputados, incluidos miembros del partido Libre, están dispuestos a votar a favor de la renuncia de Nasralla, excepto algunos.

Aunque Umaña reconoce que el tema del juicio político no está definido, señala que ya se está hablando de ello en los pasillos del Hemiciclo. Para el diputado, los actos de Redondo constituyen un abuso de poder que no puede ser tolerado, y considera que Redondo está jugando con la posibilidad de enfrentar un juicio político.

En los pasillos del Hemiciclo se habla de un juicio político y la verdad es que no se puede permitir que alguien abuse del poder que se le ha otorgado eso es un coqueteo que él está haciendo con esa posibilidad, reiteró.

El presidente del Congreso Nacional, Luis Redondo, ofreció una extensa justificación para negarle la renuncia a Salvador Nasralla, argumentando que cualquier intento de modificar la Constitución o apoyar la renuncia de un funcionario con el fin de buscar aspiraciones políticas resultaría en la destitución inmediata y una inhabilitación de diez años para el cargo.

Redondo basó su argumento en diversos artículos constitucionales y legales que, según él, prohíben la modificación de ciertos aspectos fundamentales y establecen las consecuencias legales para quienes intenten hacerlo.

“No puedo someter al pleno ni dar trámite a esta solicitud que pide, porque es violentar la Constitución y no puedo apoyar ni directa o indirectamente ningún tipo de elección presidencial, ya que se incurre en delitos, no voy a someter a los congresistas de este Poder del Estado a una acción que acarrea responsabilidad”, dijo Redondo.

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