• El coordinador general de Libre califica los resultados del 30 de noviembre como carentes de valor legal y moral, acusa injerencia extranjera de Estados Unidos y afirma que el Partido Nacional “asaltó” la Alcaldía del Distrito Central
TEGUCIGALPA, HONDURAS.–
El coordinador general del Partido Libertad y Refundación (Libre) y expresidente de Honduras, Manuel Zelaya Rosales, rechazó de manera frontal la declaratoria oficial de resultados emitida por el Consejo Nacional Electoral (CNE), al calificarla como un acto sin “valor legal ni moral” y denunciar la consumación de lo que describió como “otro monstruoso fraude electoral”.
A través de un extenso pronunciamiento publicado en su cuenta de la red social X, Zelaya afirmó que “regresó el Partido Nacional para el robo del siglo” y acusó a esa organización política de haber consumado un nuevo fraude en el proceso electoral del pasado 30 de noviembre.
Entre sus señalamientos, el exmandatario denunció específicamente el supuesto “asalto del Partido Nacional a la Alcaldía del Distrito Central”, asegurando que dicha contienda fue ganada por el actual edil capitalino Jorge Aldana, y no por el candidato declarado vencedor.
Rechazo a la injerencia extranjera
Zelaya también rechazó de forma categórica lo que calificó como injerencia directa de Estados Unidos en el proceso electoral hondureño, señalando que “el pueblo hondureño no acepta la injerencia extranjera del presidente Donald Trump y sus operadores en Honduras”.
En su mensaje, sostuvo que la declaratoria del CNE fue emitida “con las consejeras secuestradas bajo presión externa”, en un contexto de “manipulación institucional e intervención extranjera descarada”, lo que —a su juicio— invalida por completo los resultados proclamados.
Acusaciones por el caso JOH y resultados presidenciales
El líder de Libre fue más allá al vincular la supuesta injerencia extranjera con el caso del expresidente Juan Orlando Hernández, afirmando que la intromisión estadounidense se vuelve “vergonzosa y antidemocrática” cuando, según él, “perdona” al exgobernante hondureño.
Asimismo, Zelaya aseguró que la presión internacional buscó condicionar la voluntad popular, particularmente —según dijo— mediante amenazas implícitas contra el electorado si votaba por la candidata presidencial de Libre, Rixi Moncada.
Impugnaciones y llamado a la nulidad del proceso
En su pronunciamiento, el coordinador de Libre sostuvo que la declaratoria del CNE desconoce impugnaciones sobre actas y votos en al menos 230 alcaldías y diputaciones en los 18 departamentos del país, y que el proceso responde —según afirmó— a intereses de “la oligarquía, el bipartidismo corrupto y agendas extranjeras que históricamente han empobrecido a Honduras”.
Frente a lo que calificó como una “usurpación de la soberanía popular”, Zelaya enumeró una serie de exigencias, entre ellas: la nulidad total del proceso electoral, un conteo voto por voto y acta por acta bajo observación independiente, garantías para la soberanía nacional frente a toda intervención externa y la investigación de responsabilidades morales y políticas de los “operadores del fraude”.
Convocatoria a resistencia popular
Finalmente, Zelaya convocó a los colectivos de Libre y a la ciudadanía a organizarse en “resistencia popular”, argumentando que el pueblo hondureño “no nació para estar sometido ni ser vasallo”, y cerró su mensaje con la consigna histórica de su partido:
“¡La Patria es Libre o no es Patria!”.
Las declaraciones del exmandatario se producen en un contexto de alta polarización política, tras la declaratoria oficial de los resultados electorales y mientras el país avanza hacia la etapa de transición gubernamental, en medio de llamados a impugnaciones legales y protestas desde sectores del oficialismo saliente.








