- Sandra Ponce revela que países miembros expresaron preocupación unánime por interferencias del Ministerio Público, Fuerzas Armadas y Congreso Nacional a pocos días de las elecciones
TEGUCIGALPA, HONDURAS.
La exfiscal de derechos humanos y diplomática Sandra Ponce, quien participó ayer martes en la sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), confirmó que existe una preocupación unánime entre los países miembros sobre el proceso electoral hondureño.
Según explicó, los señalamientos realizados por múltiples delegaciones se fundamentan en las advertencias previas de la Misión de Observación Electoral (MOE) del organismo.
Ponce recordó que el comunicado publicado por la MOE el 4 de noviembre fue determinante para el debate, pues ya había alertado sobre posibles interferencias del Ministerio Público en la labor del Consejo Nacional Electoral (CNE), así como inquietudes mayores respecto al rol de las Fuerzas Armadas en la organización de los comicios.
“Todos los países que tomaron la palabra, tanto Estados miembros como observadores, se refirieron a ese comunicado. Reafirmaron la importancia de la independencia de la misión de observación y la necesidad de elecciones sin interferencias hacia las autoridades electorales”, afirmó Ponce.
Unanimidad y advertencia: Honduras bajo vigilancia internacional
La exfiscal señaló que hubo coincidencia total entre las delegaciones en que la situación de Honduras debe ser “seguida de cerca”, subrayando que el país debe garantizar que sus instituciones electorales —el CNE y el Tribunal de Justicia Electoral (TJE)— actúen libres de presiones políticas y jurídicas.
Varios países recordaron que las misiones de observación tienen un rol técnico, establecido en la Carta Democrática Interamericana, y advirtieron que la autonomía electoral es un requisito indispensable para la legitimidad del proceso del 30 de noviembre.
Estados Unidos respalda denuncias de interferencia
Entre las intervenciones más contundentes, Ponce destacó la del subsecretario adjunto del Departamento de Estado de Estados Unidos, Christopher Landau, quien respaldó de forma explícita las denuncias sobre presiones políticas que estarían afectando al CNE y al TJE.
“Landau expresó que comparte los señalamientos de interferencia y presión política que afectan al CNE y TJE”, relató Ponce.
El funcionario enfatizó que Honduras debe asegurar que las autoridades electorales ejerzan su labor técnica sin intromisiones externas ni condicionamientos institucionales.
Europa también advierte: condiciones deben ser libres de presiones
La representante de la Unión Europea también intervino, haciendo eco del reciente comunicado de la Alta Representante del bloque. Reafirmó la importancia de la misión de observación electoral europea —ya desplegada en el país— y expresó preocupación por la necesidad de que el proceso transcurra en condiciones libres, transparentes y sin presiones institucionales.
Congreso Nacional: un punto crítico para la OEA
Además de las interferencias al CNE y TJE, Ponce explicó que las delegaciones también abordaron la situación del Congreso Nacional, tras la controversia generada por la designación de una comisión permanente, señalada como ilegal por diversos actores internacionales.
Recordó que el Congreso únicamente puede constituirse válidamente con la participación de la mayoría de los diputados, y que las sesiones estaban prorrogadas desde la reunión extraordinaria del 28 de octubre.
Una cadena de advertencias que converge en Honduras
Ponce subrayó que los llamados de atención no son aislados. El comunicado de la MOE del 4 de noviembre, las declaraciones del Secretario General de la OEA, las intervenciones de Estados Unidos, la Unión Europea y de varios países miembros forman una cadena de advertencias sobre la erosión de la independencia electoral en Honduras.
La sesión extraordinaria del Consejo Permanente ocurre en un momento crítico: a solo días de las elecciones generales del 30 de noviembre, mientras la comunidad internacional eleva su nivel de vigilancia ante posibles interferencias institucionales.










